Las exportaciones españolas de vino crecieron en noviembre, y por segundo mes consecutivo, un 12,5% en volumen, aunque siguen perdiendo puntos en valor y acumulan un descenso del 15% en los 11 primeros meses del año 2009.
Según datos analizados por el Observatorio Español del Mercado del Vino (OeMv), las exportaciones españolas de vino registraron en noviembre de 2009 un crecimiento del 12,5% hasta situarse en los 141 millones de litros, frente a los 126 millones del mismo mes del año anterior. A pesar de este crecimiento, que confirma el ya registrado durante el mes de octubre, las exportaciones durante los 11 primeros meses de 2009 mantienen una evolución negativa, con pérdidas del 11% en volumen y del 15% en valor, hasta situarse respectivamente en los 1.384 millones de litros y los 1.568 millones de euros.
La recuperación en volumen registrada durante los meses de octubre y noviembre, proviene fundamentalmente del aumento de las ventas de los vinos de mesa a granel. Durante el mes de noviembre las ventas de vino a granel crecieron un 37%, es decir, 16,5 millones de litros más. Este aumento ha ido ligado a una fuerte disminución del precio medio (-25%).
Los vinos espumosos, aumentaron sus ventas en volumen (+8,2%) en noviembre y en el dato interanual (+1,8%), mientras que caen un -3,8% en el acumulado, lo que indica que la peor evolución en las ventas se produjo en los primeros meses de 2009.
Suben también en el mes las exportaciones en volumen del vermut (+1,4%) y de los vinos de licor como el Jerez (+14%).
Por el contrario, se ha producido una caída en las exportaciones de los vinos con denominación de origen que disminuyeron en 2009 (hasta noviembre) un -11% en valor, un -13% en volumen y un aumento del precio medio del 2%. También evolucionan de forma negativa los vinos de mesa envasados, que cayeron un -7,6% en valor y un -13,5% en volumen, con un aumento del precio medio del 7%.
Se mantienen muy fuertes las ventas de este año en Bélgica y Portugal, mientras caen las registradas a Holanda, Rusia e Italia y, más suavemente, las dirigidas a mercados como Reino Unido, Francia y Estados Unidos.
En definitiva, la caída de precios de nuestros vinos -especialmente la de los más económicos, como los vinos de mesa a granel, y registrada principalmente a partir del pasado verano- ha permitido la recuperación de nuestras exportaciones. Mientras, siguen cayendo las ventas de los vinos con denominación de origen y de mesa envasados, cuyos precios medios aumentan. A un mes de cerrar el año, podemos prever un 2009 con pérdidas, aunque con signos de recuperación, sobre todo en volumen, a costa de un descenso de los precios.